¿Cuántas personas quieren que con sus impuestos se procure una mejora en el medioambiente? La preservación de la biodiversidad, el derecho a la vida de las especies que pueblan la Tierra y el intento de preservar la naturaleza y dejar el medio natural y el medio humanizado en mejores condiciones a las generaciones que vienen detrás de nosotros parecen objetivos racionales, compartidos por la mayoría de las personas de bien, pero tristemente vemos como las políticas locales, autonómicas, estatales y europeas constituyen una maquinaria destructiva que destruye calquera intento justo de mejora medioambiental.

Vertido en Coruxo en la ría de Vigo

Sobre el papel, el dinero de nuestros impuestos se dedican a la mejora medioambiental. Más de 25.000 millones de euros ha recibido Galicia de fondos europeos para el supueto objetivo de acometer un saneamento real de las Rías. Sin embargo, la realidad muestra una gestión indebida de tales fondos (cuando menos en los aspectos técnicos y económicos, y probablemente también en el legal), traducida en un aumento imparable de la contaminación en las Rías. La construcción de redes unitarias que contaminan las aguas pluviales al mezclarlas con las aguas residuais; un conjunto de depuradoras deficitarias, cuando no inoperativas, la ausencia de interconexiones que permitan transvasar agua contaminada de una depuradora a las otras en caso de avería; la ausencia total de predepuración de aguas industriales; la falta de mantenimiento de las redes generales; los errores en la instalación de colectores y las averías en los bombeos, no parecen maneras de conseguir alfuna mejora. El resultado son cientos de puntos negros de contaminación en toda la costa gallega, censados cada año por la propia administración pública a través de los informes de Augas de Galicia.

Vertido en la salida de la depuradora de Cangas

La privatización del saneamiento y del abastecimiento de aguas municipales, modelo de liberalización de los servicios públicos que tanto le gosta a la UE, provoca que los ayuntamientos y la administración pública se desentiendan de sus obligaciones y las empresas concesionarias incumplan sus contratos en materia de construcción de infraestruturas y canalizaciones o de puesta en funcionamiento de fases de depuración, por ejemplo, el tratamiento terciario bacteriológico instalado con fondos públicos por la propia Xunta de Galicia en la EDAR de Cangas.

Los objetivos economicistas que marcan a la empresa privada, se traducen en falta de inversiones en mantenimiento, en inoperatividad puntual de sistemas de bombeo y de depuración de aguas residuales, especialmente cuando llueve torrencialmente o por las noches, diluyéndose de forma oculta una vez más las aguas residuales sin depurar hacia el medio acuático o marino.

Vertido a la salida de la depuradora de Redondela

A esto hay que añadir el grave impacto ambiental de las obras realizadas incorrecta o negligentemente para ahorrar dinero en tuberías y sistemas de bombeo. Los colectores se situan en las laderas de los ríos y regatos, o en su propio lecho; también se sitúan en primera línea de costa, taladrando acantilados, estropeando acantilados y rocas, ocupando espacios dunares e instalándose incluso dentro de la ribera del mar, en las propias rías, en suelo rústico de especial protección.

Y a todo esto se le suma una irresponsable insistencia en la especulación urbanística, materializada en Planes Generales de Ordenación Municipais que aún hoy, tras varios años de crisis, se diseñan muy por encima de las previsiones demográficas reales y de la capacidad de acogida del territorio. Esto impide toda planificación racional de abastecimiento de agua potable y de la depuración de las aguas residuales.

Pero... hay alguien más comprometido con la defensa del medioambiente que nuestros/as gobernantes? Oidlos: siempre obrando de buena fe, trabajando incansables en la procura del bien común, abanderados de las luchas contra las desigualdades sociales, la corrupción y el paro, Reyes de la sostenibilidad, Marqueses de la ecología, Condes de la biodiversidad... Resulta que el único culpable de todos estos hechos es la dura realidad, que con una terca osadía le gana todas las batallas, día a día, a estos baluartes de nuestra sociedad. Baste una ojeada a nuestra hemeroteca para dar fé de ello.

El programa del PP para las prçoximas elecciones europeas 2014, en su página 28, retrata el sentir medioambiental de la clase política dominante:"

"...En cuanto a la directiva de depuración, trabajaremos para que la Unión Europea sea más flexible, en atención a los plazos y las circunstancias, de modo que los procedimientos relacionados con el incumplimiento de plazos no lleguen a suponer sanciones económicas". Programa do PP para as eleccións europeas 2014.

Ría do Burgo en la Coruña

¿Por qué no se habla de contención, más aún, de decrecimiento urbanístico? ¿Por qué no se acomete un saneamento racional, integral y descentralizado? ¿Por qué no se planifican redes de depuradoras de tamaño reducido, distribuídas según las cuencas fluviales del territorio y debidamente interconectadas para transferirse carga de contaminación en caso de avería? ¿Por qué no se construyen redes separadoras de aguas pluviales y residuales? ¿Por qué no se obriga ao tratamento en orixe das aguas residuais inorgánicas e industriais? ¿Por qué no se acomete la regulación y racionalización del ciclo del agua (consumo de agua potable y no potable según usos, minimizando la generación de aguas residuales, con aprovechamiento ecológico y de uso de las aguas depuradas)? ¿Por qué no se sitúan los sistemas de depuración fuera de los espacios naturales teoricamente protegidos? ¿Por qué no se aplica estrictamente la Directiva Marco del agua? ¿Por qué no se acomete la reducción del excesivo parque acuícola de monocultivos marinos que arruinan la pesca y la biodiversidad de las rías? ¿Por qué no se diseñan campañas intensivas de concienciación para la reducción en origen, hasta eliminar, los residuos sólidos que tras su vertido marítimo y llevados por la dinámica litoral vuelven en grandes cantidades a los arenales de la franja supralitoral? Desechos urbanos acumulados enla playa de la Xunqueira en Moaña ¿Por qué no se decreta la prohibición de todo nuevo relleno o dique portuario, incluso sobre pilotes? ¿Por qué no se promueve la pesca responsable fuera de monopolios empresariales y productivistas, la creación de reservas o áreas marinas protegidas y la protección real y efectiva de los espacios protegidos gallegos?

Las personas de bien estamos hartas de esta pretendida infalibilidad gubernamental, y da su proverbial impunidad. Exigir el cumplimiento de las leyes se está convirtiendo en un acto revolucionario que se vuelve muchas veces contra nosotros, mostrando la sinrazón de éste mundo ininteligible.

Una vez más este absurdo viene a ser confirmado desde Bruselas con un informe de la comisión de peticións del parlamento europeo sobre la contaminación de las rías gallegas, que describe un escenario en el que no hay culpables, en el que por no haber no hay casi ni contaminación. Si no fuese porque estábamos presentes cuando vinieron los miembros de la comisión y sus políticos acompañantes, dudaríamos de su presencia en las rías.

Miembros de la comisión europea en su visita a las rías gallegas

Y como no hay regla sin excepción, es justo reconocer la más que digna contribución de dus miembros de la comisión: la austriaca Angelika Werthmann, de Alianza de los Liberales y Demócratas por Europa, e la letona Tatjana Zdanoka, de los Verdes-Alianza Libre Europea, que se negaron a que apareciesen sus nombres y firmas en el informe final, dado su frontal desacuerdo con el presidente de la comisión. Este, Philippe Boulland, do Partido Popular Europeo, tenía la última palabra y, con los votos del PP y del PSOE, sumaron las complicidades municipal, autonómica y estatal a la europea, llevando a las rías gallegas a un campeonato europeo de espacios contaminados, y dejando a las gallegas y gallegos reos de un crecimiento incontrolado e insustentable.

Porto exterior da Coruña en Punta Langosteira

Se están batiendo records en contenido de metales pesados y contaminación química y biológica; en rellenos faraónicos, en puertos exteriores que se revelan innecesarios o inútiles para su cometido; en la ocupación y degradación de sus aguas y de su lecho marino por los rellenos de los puertos interiores y de los puertos deportivos; en los efectos de un desmesurado tráfico de cargueros, petroleros, gaseros y trasatlánticos, en la proliferación de parques industriales en la misma línea de mar, de nuevas e impactantes autovías que con el aumento del tráfico viario, desaguan residuos de hidrocarburos, metales pesados y aceites a las redes fluviales y de ahí a las rías, en la acumulación de cenizas en los fondos marinos procedentes de los incendios forestales fruto de la intencionalidad humana y de la nefasta política forestal y en las consecuencias de los pelotazos urbanísticos.

ENCE en la ría de Pontevedra

La degradación de las rías por causas industriales ofrece ejemplos palmarios de errores antiguos con perseverancia en los mismos: la permanencia de las contaminantes factorías de ENCE-ELNOSA en Lourizán, a refinería de petróleo en la Coruña, la factoría de Alúmina-Aluminio en San Cibrao, la consolidación de las plantas de gas natural de REGANOSA en Mugardos o la factoría de Ferroatlántica en la ría de Corcubión, son ejemplos evidentes.

La EDAR de Vigo, cuya defectuosa planta anterior fue construída hace pocos años y con fondos europeos, invadiendo el dominio público marítimo-terrestre y el ecosistema natural de la Xunqueira do Lagares, está siendo destruída y levantada de nuevo en el mismo lugar. Esta planta repite los errores de diseño de la planta original y no resuelve los problemas estructurales del saneamiento de Vigo (una sola EDAR, una red de saneamiento unitaria y la ausencia de depuración de aguas industriales en origen). Esto supone la consolidación de los problemas actuales: avería periódica de los sistemas de depuración y contaminación recurrente de la Ría por descargas del sistema unitario en caso de lluvia, sobre todo cuando es torrencial, pero también supone un agravamiento de estos problemas hasta un nivel calificable de amenaza de catástrofe ambiental en caso de avería o en caso de afluencia de un mayor caudal temporal de las aguas residuales a tratar. Estos hechos, unidos a la falta de saneamento de muchos núcleos de población, y a las deficiencias del resto de las depuradoras de la ría, especialmente las de Redondela y Cangas, conforman las condicións idóneas para el desastre.

Manifestación en Vigo el 14 de noviembre de 2009: OS RECHEOS MATAN A RÍA

Las rías gallegas siempre conformaron una de las zonas costeras de más alta produtividad biológica del mundo, y tienen una excepcional relevancia geolóxica, natural, paisajística, social y cultural. Pero los ataques continuos a estos valores están poniendo en peligro la posibilidad de autorecuperación de las rías.

La pesca extractiva genera solo en la ría de Vigo cerca de 30.000 empleos y, por lo tanto, es la primera empresa de la comarca. Sin embargo, este excepcional recurso natural y bien público contempla como las multimillonarias ayudas europeas no se utilizaron para mejorar la gravísima situación actual, con tendencia a empeorar, mientras las subvenciones municipales, autonómicas y estatales recaen siempre en empresas privadas.

Que perverso milagro obran las palabras de los políticos en los oídos de las persoas para que la vibración de unas simples cuerdas vocales hagan ignorar la cruda realidad?

Tampoco esta vez será Bruselas quien, desde su aparato burocrático, potente en medios y parco en inspecciones, ponga las cosas en su sitio, señale a los culpables, cambie el rumbo y ponga la razón y la sostenibilidad por encima de los intereses políticos, macroeconómicos y transnacionales que por desgracia siguen prevaleciendo a nivel europeo y mundial.

Como en el poema de Manuel Antonio,

Estamos solos. La insólita soledad de la mayoría que, callada, paga y sufre toda esta farsa.

Para la realización de este artículo, agradecemos la colaboración
de las compañeras y compañeros de la red A Ría non se vende

Vigo, 25 de mayo de 2008. Manifestación contra los rellenos en la ría. A Ría non se vende.