La Federación Gallega de Cofradías de Pescadores, que representa a 20.000 profesionales de la pesca de bajura y el marisqueo, ha presentado ante la Fiscalía de Medio Ambiente del Tribunal Superior de Xustiza una denuncia por la contaminación "muy grave" de las rías y la costa gallega y pide al tribunal que "identifique focos de contaminación y responsabilidades". Para los pescadores uno de los principales culpables es "la fuerte presión urbanística en la costa y la deficiente infraestructura de saneamiento y depuración de aguas residuales", señalando así como responsables a la Xunta y a los ayuntamientos. "Aguas de origen fecal en ocasiones se vierten de forma continuada sobre los bancos marisqueros", poniendo en peligro el empleo de más de nueve mil personas, alertan desde la federación de cofradías.

El conselleiro de Medio Ambiente, Manuel Vázquez, defendió la gestión de su departamento, recordando que este año prevé licitar todas las depuradores de las rías gallegas, lo que supone una inversión superior a los 220 millones de euros, pero advirtió de que la Xunta encuentra dificultades para ubicar estas instalaciones. Aseguró que hay "un número preocupante" de ayuntamientos que pone trabas para facilitar los terrenos y citó el caso de O Grove. Por ello, el conselleiro pidió a las cofradías que "presionen políticamente" a los alcaldes, que deben tomar conciencia de la importancia de garantizar la calidad de las aguas.

Los mariscadores y pescadores denuncian que están en "una situación límite" y exigen que se aplique la ley y se castigue por "delito ecológico" a quien lo comete, pero no a quien lo sufre. "A nosotros no nos vale la excusa de que faltan terrenos para instalar las depuradoras. Estamos hartos de pagar los platos rotos de otros", denunciaba ayer Xan López, de la federación de cofradías. También recordaba que los últimos incendios y riadas han agravado la situación, "degradando la calidad" del marisco y pescado e impidiendo temporalmente la comercialización del producto.

Para convencer al TSXG de que tome cartas en el asunto las cofradías encargaron un estudio de contaminación a una empresa. El informe se adjunta con la denuncia y en él, al margen de la depuración de aguas, se recogen otras amenazas de la costa gallega como los sentinazos de los buques, la explotación de granjas marinas "sin suficiente control" o las conserveras.

La federación también adelanta que a partir de ahora hará una vigilancia continua en la franja costera y ante cualquier agresión acudirá puntualmente a la Justicia para presentar denuncia.