Los profesionales se han trasladado a trabajar a otras áreas o se dedican a recoger otros productos, como algas
Si el año pasado no fue flamante para el marisqueo en Galicia a consecuencia de los incendios y las riadas, el 2007 tampoco pasará como un buen ejercicio para las economías de los mariscadores, alrededor de 10.000 personas en la comunidad. A los bajos precios que han marcado durante la mayor parte del verano bivalvos como la almeja -que empieza a recuperarse- hay que sumar la prohibición de mariscar en muchas zonas a consecuencia de la contaminación.
La situación actual apunta que nueve de las rías gallegas mantienen una o varios de sus bancos cerrados a la recogida de moluscos para el consumo en fresco debido a la polución (zonas que reciben la catalogación de zona C). En estas áreas únicamente se permite para la venta a conserveras.
Y el verano, con el aumento de la población en áreas costeras en las que aún hay deficientes sistemas de depuración del agua - como alertan las cofradías- hace que la perspectiva para el sector no sea alentadora.
Situación en Foz
Este es el caso de Foz y de la Ría de Barqueiro, en Lugo, que en los meses de verano pasan de tener calificación de B -en las que se exige una depuración de los bivalvos para poder venderlos- a estar cerradas, por la presencia de fecales. Sólo se reabren pasado septiembre. De cara al año próximo, la Xunta asegura que una depuradora solventará este problema.
De momento, sólo sobre la ría de O Burgo, en A Coruña, existe la amenaza de que la apertura para el marisqueo, en principio prevista para mañana, se retrase por excesiva contaminación.
Otras áreas, ni siquiera tienen fecha prevista de reapertura.
Pontevedra
El fondo de la ría de Pontevedra está clasificada como zona C y sin previsión de que cambie. En la zona sur del banco, los mariscadores del banco de Lourizán tienen previsto mantener una reunión con la consellería de Pesca el próximo mes de septiembre para conocer cuándo las condiciones permitirán que vuelvan a la faena.
En la banda norte de la ría, las zonas de Raxó y de San Telmo de Pontevedra están calificadas como zonas B. El problema es que las pasadas ríadas causaron serios daños en el suelo en Raxó y se perdió gran cantidad de almeja. El resultado es que no tiene suficientes recursos para servir de materia prima a cuatrocientos mariscadores.
Corcubión
Corcubión, desde el 2003 ha dejado de ser zona de marisqueo. Y Cee, desde hace casi un año. Sin saber aún a ciencia cierta el origen de las altas dosis de hidrocarburos, nadie es plantea siquiera la apertura de la zona. Las mariscadoras, ante la incertidumbre sobre si podrá a coger bivalvo algún día, han optado por la recolección de algas.
A Illa de Arousa
El reló, que estuvo en observación casi año y medio por la alta presencia de plomo en el molusco, ha vuelto a recogerse en la zona de Arousa, excepto en A Illa, donde la cofradía no ha recibido contestación de la Xunta respecto a la fecha de reapertura de la campaña. En la zona de la Barbanza tampoco se ha autorizado la recogida.
Ferrol
Los bancos de almeja babosa de As Pías, permanecen cerrados de manera cautelar desde principios de este año por los altos niveles de toxicidad orgánica detectados en los bivalvos. La situación actual de la ría en la que se vierten a diario toneladas de residuos orgánicos sin control alguno, apenas permite la regeneración de los lugares más ricos en población de almeja en este estuario. De hecho, la Xunta ha previsto un plan de choque para ofrecer a los mariscadores (más de 450 personas viven de la extracción de este molusco) trabajos alternativos hasta que entren en servicio las redes de saneamiento de ambas márgenes del estuario ferrolano.
Aunque Baiona ha vivido un complicado año con varios cierres por presencia de contaminación de fecales, especialmente en primavera, lo que más preocupa ahora a los pescadores es el proyecto de Portos de Galicia de adjudicar una lámina de agua de 36.000 metros cuadrados para instalar un fondeadero para embarcaciones de recreo. La Cofradía reclama unos derechos históricos sobre esa zona ubicada frente a la playa Barbeira y ayer el patrón mayor, Jesús López Méndez, amenazó con llevar a cabo una huelga de hambre si finalmente se lleva a cabo la adjudicación. Afirman que si el proyecto sale adelante, se destruirá una zona de marisqueo en la que faenan habitualmente una treintena de embarcaciones. Hasta ahora han conseguido el apoyo de la corporación municipal, reunido a más de 3.000 personas en una manifestación y conseguido unas 6.000 firmas en contra del proyecto.
En la zona trabajan 90 mariscadores que se dedican, fundamentalmente, a la extracción de almeja cerca de la costa que seguirán preocupados hasta que se ponga una solución definitiva a las deficiencias en la red de alcantarillado.
El gobierno de Touriño anunció ayer una inversión de 28 millones de euros para la construcción de la primera estación depuradora de aguas residuales de Baiona, con la que se conseguirá el saneamiento integral de la bahía.