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VAL MIÑOR

15/03/2007 | N. P. | GONDOMAR


OTRA COMPAÑÍA TIENE ORDEN DE PARALIZAR LA ACTIVIDAD POR LA MISMA CAUSA, PERO CONTINÚA SUS TRABAJOS


Seprona y Concello denuncian depósitos ilegales de material de obra en Vincios


La Guardia Civil acusa a una empresa de la zona por ocupar una finca rústica de protección forestal.


David Morais muestra las fotografías de su coche con pintadas. / josé lores

El Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil y el Concello de Gondomar han denunciado depósitos ilegales de material de obra en la parroquia de Vincios. Según el departamento de la Benemérita, montes calificados como rústicos de protección forestal albergan almacenes de material de obra de una empresa relacionada con el sector de la construcción en el barrio de Tumbio. El Seprona la denunció ante el ayuntamiento y la Consellería de Política Territorial, pero ninguna de las administraciones ha tomado medidas. Mientras tanto, el gobierno municipal ha abierto un expediente de reposición de la legalidad a otra y le ha ordenado paralizar su actividad, aunque continúa con sus trabajos.

La denuncia del Seprona se refiere a la promotora Conspromiñor, que cerró una parcela para acumular material de construcción y realizar una pequeña nave.

Los agentes realizaron un informe el pasado año y se lo notificaron a las administraciones, pero el departamento de la Xunta se dirigió al ayuntamiento únicamente para solicitar información. A pocos metros de esta finca se encuentra otro cercado en el que opera otra empresa relacionada con la construcción. La compañía dispone de un largo historial de acusaciones por depósitos de escombros ilegales en la comarca, pero por este caso no ha sido denunciada.

La tercera irregularidad urbanística en la zona corresponde a la empresa de maquinaria de obra Roal, que dispone de un taller de reparación a unos cincuenta metros de las dos anteriores. Además de arreglar los vehículos, la compañía guarda combustibles y aceites en los terrenos. Sólo este negocio se enfrenta a una orden de paralización por parte del ayuntamiento, aunque hasta el momento no la ha acatado, por lo que el propio alcalde, Carlos Silva, indicó que decretaría su precintado.

Una zona apartada y de difícil acceso como las mencionadas fincas de Tumbio se convierten en el lugar perfecto para desarrollar una actividad empresarial de forma irregular. Y es que ni siquiera el gobierno local tiene constancia de la presencia de todas las empresas. El regidor asegura conocer únicamente el caso de la firma de maquinaria Roal, pese a haber recibido la notificación del Seprona respecto a Conspromiñor.

Ataque

Pero las quejas vecinales contra estas empresas se repiten. David Morais, residente en la zona cuya vivienda se sitúa en la finca contigua a la de Roal, las denunció ante el Seprona. Sus acusaciones se centran especialmente en esta última compañía porque asegura que la reparación de vehículos de construcción afecta a su vida diaria. El manejo de combustibles, aceites y los ruidos que el taller de arreglo de maquinaria emiten especialmente los fines de semana resultan muy molestos a su familia, por lo que decidió denunciar hace un año ante el mencionado servicio de la Guardia Civil, la Consellería de Política Territorial, la de Industria y a la Inspección de Trabajo.

Pocos días después de hacer oficiales sus quejas con firmas de decenas de vecinos de la zona, David y su familia recibieron una respuesta en forma de amenaza. Su furgoneta amaneció pintada con insultos y advertencias. Desde entonces, no han vuelto a dormir tranquilos.




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