Vigo es la única ciudad gallega, con Pontevedra, que carece de punto limpio para residuos voluminosos y peligrosos.
El Plan Xeral de Urbanismo contemplaba ocho puntos en diferentes zonas del término municipal que hasta el momento no se han desarrollado. En concreto, se situaban en Costa (Castrelos), polígono industrial de Matamá-Valadares, Carrasqueira (Coruxo), Saiáns, polígono industrial de reciclaje (Bembrive), Liñeiriños (Cabral), Cereiro (Cabral-Candeán) y Ameal (Cabral).
Ayer, el concejal del PP, Antonio Martiño, denunció la falta de sensibilidad y contradicciones de Caballero, quien por un lado presume de abanderar cuestiones medioambientales como la Red de Ciudades por el Clima y por otro, abandona estos mismos temas en la ciudad. Desde hace meses el alcalde responde con un «pronto» cada vez que los medios de comunicación le preguntan por la fecha de la puesta en marcha de este servicio ciudadano. Martiño recordó que concellos de la provincia como Mondariz Balneario, Vilagarcía, O Rosal, Cambados, Arbo, O Grove, Forcarei, Lalín o A Estrada cuentan con puntos limpios. A su juicio es una vergüenza que la ciudad más grande de Galicia no tenga ni uno solo, una consecuencia más de que a estas alturas no se haya desarrollado el Plan Xeral.
Los puntos limpios permiten el traslado de residuos como aceite doméstico e industrial, filtros de aceite, baterías, fluorescentes, disolventes, pinturas, pilas, electrodomésticos, metales, maderas, colchones, ropa y calzado usado, entre otros.
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