El proceso de concesión de licencias en Finca do Conde, la urbanización declarada ilegal por los tribunales en la que están ubicados el centro comercial Gran Vía y dos torres con 230 viviendas, se frena en seco. El gobierno local aprobó ayer la suspensión de licencias en el ámbito en el pleno más corto de todo el mandato. Dos minutos duró la sesión vespertina, la segunda del día, ya que el bipartito necesitaba mayoría absoluta y por la mañana el alcalde estaba en un acto en Madrid. Sólo intervino el PP tras la votación para explicar que se abstuvo "porque los tres informes que acompañan a la propuesta indican que es necesario redactar un informe técnico", indicó su portavoz, José Manuel Figueroa. El concejal de Urbanismo, José Mariño, habló al término de la sesión para exponer que el acuerdo tiene por objeto "buscar una solución definitiva para resolver de una vez por todas el problema de legalidad urbanística en Finca do Conde".
La decisión implica la suspensión de la tramitación de las ocho peticiones de licencia en el ámbito. Los promotores buscaban ampararse en el Plan Xeral para dar encaje legal al centro comercial y las torres, pero el bipartito sostiene que la concesión de permisos no se atiene a los fallos judiciales. "No volveremos a enredar para ganar plazos y acabar acarreando nuevas sentencias", justificó Mariño, quien adelantó que se contratará a una empresa para empezar a cambiar "de inmediato" el Plan Xeral en Finca do Conde. El uso prioritario al que debía ajustarse la urbanización, según indica la sentencia del Tribunal Superior de Xustiza "debe ser el residencial", expuso el edil, ya que el ámbito estaba regulado por el PXOM de 1993 y éste así lo establecía. Ahora el uso principal es el comercial, ya que la gran superficie tiene más de 60.000 metros cuadrados, casi el doble del suelo para viviendas.
Informes
Mariño no aclaró cómo se conseguirá que el primer uso sea el residencial en el ámbito ni si tiene encaje legal el centro comercial con su superficie actual. "Habrá que esperar a las propuestas", dijo. Previamente había señalado que éstas se presentarán "lo antes posible, porque en esa zona trabajan muchas personas y viven muchas familias". El concejal también calificó de "absolutamente falso" que se precisen un informe técnico para suspender las licencias. "Es necesario para modificar el Plan Xeral, y se redactará cuando se haga. Una vez más el PP intenta engañar a la ciudadanía", aseguró. Figueroa indicó en el pleno que su grupo se abstuvo tras leer los informes del secretario de la Gerencia, la del ayuntamiento, y el interventor. "No hay un informe técnico que justifique la conveniencia y el fondo del tema", argumentó.
El Concello dispone a partir de ahora de un plazo de un año para modificar el Plan Xeral antes de que se levante la suspensión de licencias. Según Mariño, los doce meses no llegarán a agotarse, ya que "se contratará a una asistencia técnica para dar una respuesta definitiva al ámbito lo antes posible".
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