La Autoridad Portuaria de Vigo no ve necesario iniciar un estudio de impacto medioambiental en la segunda fase del relleno que proyecta realizar en el muelle del Areal, situado cerca del céntrico paseo de Montero Ríos. La primera fase, que supone una ampliación de 49.200 metros, está ejecutándose sin esos informes porque así lo autorizó el Ministerio de Medio Ambiente. La existencia de un plan anterior frustrado, que incluía rellenos superiores en tamaño a los decididos finalmente, amparó la actuación, que mejorará el calado en esa zona entre cuatro y cinco metros.
En 24 meses comenzará la segunda fase, que ganará al mar otros 30.200 metros para conseguir más espacio para el atraque de los buques y un calado de hasta 16 metros. La suma de las dos obras, que conseguirán casi 80.000 metros cuadrados de superficie adicional, no se ajusta, sin embargo, a lo que dice el Plan Especial de Ordenación del Puerto, según un informe del ayuntamiento de Vigo. El documento especifica que, además, "requeriría de la previa aprobación del Plan de Usos", en opinión de los técnicos de Urbanismo. Por todo ello, el ayuntamiento ha advertido a la Autoridad Portuaria, que preside Corina Porro, que debe de someter el plan a un análisis de impacto por "los efectos acumulativos y significativos para el medio ambiente que puede producir con el proyecto anterior y otros previstos o en ejecución que afectan a la ría de Vigo".
Porro cree que hacerlo equivale a poner el carro delante de los bueyes: cuando llegue el momento de licitar la operación se supone que estará aprobado el Plan de Usos, y quiere someter la obra a su amparo. "Se está engañando a la opinión pública con informes innecesarios", dice Porro en referencia directa al ayuntamiento. La presidenta insiste en que le ha preguntado al ministerio que dirige Elena Espinosa qué informes deberá presentar para ese segundo relleno. El ministerio confirma que la consulta ha sido realizada y que el expediente está abierto.
Pero desde el ayuntamiento que preside Abel Caballero, su rival en las pasadas elecciones municipales, se le recuerda que una sentencia del Tribunal Supremo declaró ilegales las obras de relleno en Marín "realizadas al amparo, únicamente, del Plan Especial, sin contar con el Plan de Usos". La Autoridad Portuaria fue condenada junto a la Xunta y la Diputación de Pontevedra a reponer la zona a su anterior situación, algo que a estas alturas parece imposible de cumplir. El fallo tumbó la decisión inicial del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia.
En Vigo se rellena la primera fase con escombros procedentes del AVE y se estudia la manera de continuar prolongando el muelle Transversal en 80 metros hacia el interior de la ría. El Puerto baraja tres posibilidades para realizar esa segunda ampliación. En su análisis, el informe firmado por el director del Puerto, Luis Lara, destaca que las tres alternativas tendrán un impacto sobre el medio "relativamente similar". Las obras de atraque y explanadas provocarán "ocupación de fondos, modificación hidrodinámica y ruidos".
La primera de las alternativas propone construir un muelle de cajones de hormigón cimentados en una banqueta de escollera (apoyo que comúnmente se usa en ingeniería marítima) con columnas de grava que afiancen la obra. Es la opción menos agresiva atendiendo al volumen de relleno que necesita (560.000 metros cúbicos), para conseguir una explanada de 30.200 metros. Si se decanta por esta opción, el Puerto estará obligado a dragar 260.000 metros cúbicos de lodos.
La segunda alternativa partiría de un muelle de pilotes que conseguiría la misma superficie pero con un relleno sensiblemente mayor, de 600.000 metros cúbicos. No harían falta dragados, pero sí tendría un importante volumen de escollera de 80.000 metros cúbicos.
La última opción, también sin dragado, se basa en un muelle de tablestacas (perfiles, generalmente metálicos, que se usan en obras definitivas). Necesitaría un relleno de 900.000 metros cúbicos.
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