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GALICIA

24/03/2014 | A. Otero
   

Un vertido arrasa la fauna piscícola del Lagares entre Miraflores y su desembocadura en Samil


De posible origen químico, mató a miles de peces y anfibios que acabaron esparcidos a lo largo de la orilla de la playa - El Concello sospecha que el líquido contaminante llegó al río a través de un afluente procedente de la zona industrial de Beade


La muerte de miles de peces y anfibios por un vertido en el Lagares impactó en la mañana del domingo primaveral que disfrutaron ayer los vigueses. Desde Miraflores hasta su desembocadura en Samil, el río discurría plagado de cadáveres de truchas, reos, mújoles, anguilas, ranas, lombrices... Unos flotando, otros en el fondo, algunos moribundos en las márgenes; de todos los tamaños, desde alevines hasta maduros. Los paseantes observaban atónitos este reguero de muerte desconociendo todavía su verdadera magnitud. La contaminación había arrasado la fauna piscícola a lo largo de seis kilómetros de cauce, aunque para hacerse una idea de las funestas consecuencias bastaba con desplazarse hasta la orilla de Samil. Allí yacían esparcidos por la arena de la playa los ejemplares de las víctimas de este nuevo golpe al medio ambiente. Las primeras hipótesis que manejan los investigadores apuntan como posible causa a un líquido de composición química. Sobre su procedencia, el Concello sospecha del entorno industrial de Beade/Valladares, y que habría alcanzado el Lagares a través de uno de sus pequeños afluentes, el Barxa.

Tan letal como escurridizo. La Policía Local recibió el primer aviso de la aparición de peces muertos en el Lagares a las 9.45 horas. Poco después, Augas de Galicia activó el Plan de Control de Vertidos (PCV), y el operativo para localizar el origen de la contaminación se amplió aguas arriba de la desembocadura con la participación, además de los agentes municipales, de los del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil, y de los guardas fluviales de la Consellería de Medio Ambiente. "De A Barxa para arriba hay vida, así que hay que investigar el afluente", indicaron a este periódico varios agentes.

Hasta aquí llegan las conclusiones. Sobre el tipo de vertido, hasta ayer tarde todo eran hipótesis. Lo más probable es que sea químico, pero no es suficiente para determinar la procedencia, si industrial o particular. El análisis en el laboratorio municipal de las muestras recogidas sobre las 14.00 horas arrojó "parámetros normales de PH y oxígeno", o lo que es lo mismo, "aguas limpias y cristalinas", apuntaron desde la Policía Local. Esto complica la investigación, que ahora se centra en el examen de los ejemplares muertos.

"Lo triste es que hace una semana que se permite pescar en este río después de seis años de prohibición, y ahora esto arruina toda la recuperación conseguida", se lamentaba un guarda fluvial. Fuentes autonómicas confirmaron la fatalidad. En septiembre de 2008, a causa de uno de los vertidos contaminantes más graves sufridos por el Lagares, Medio Ambiente de la Xunta impuso una veda que se levantó el pasado domingo.




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