La flota del cerco ha vuelto a la carga avivando sus protestas contra la Administración por el reparto de las cuotas de jurel y caballa. El barrio vigués de O Berbés se ha convertido esta madrugada en escenario de disturbios. Los manifestantes han bloqueado los accesos al puerto, quemado contenedores y provocado un ruido ensordecedor con bocinas y petardos pasadas las seis y media de la mañana.
Los túneles permanecían cortados y ni coches ni camiones podían avanzar. Jóvenes cubiertos con pasamontañas también lanzaron bengalas. La policía se ha mantenido al margen sin intervenir. Pasadas las 8.30 las protestas se trasladaron y temporalmente se reinstauró el tráfico en la zona, donde se realizan trabajos de limpieza.
La situación ha afectado a toda la circulación de los túneles de Beiramar y a calles adyacentes del centro de Vigo, lo que ha generado retenciones múltiples durante la primera hora de la mañana, cuando más intensidad de tráfico se registra.
La marea humana intentó trasldarse hasta la delegación de la Xunta en Vigo para llevar allí su protesta, pero la fuerte presencia policial disuadió a los manifestantes, que llegaron a lanzar piedras contra las oficinas. Finalmente los marineros, que portaban un ataúd simbólico, regresaron a la zona portuaria y volvieron a cortar el tráfico. La Policía Nacional mantuvo la zona vigilada a una distancia prudencial. Pasadas las 10 de la mañana los manifestantes han desbloqueado el tráfico en la zona y se han retirado al interior del Puerto de Vigo.l
Esta no es la primera ocasión en la que los marineros del cerco protestan en Vigo. El pasado 10 de febrero volvieron a dejarse notar bloqueando el tráfico en la zona de acceso al puerto de Vigo.
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