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La Voz de Galicia

GALICIA


Los jefes de la cantera de Muras que proveyó al Gaiás, absueltos de delito ecológico


18/04/2013 | Xosé Carreira
| LUGO
   

El fallo se basa en las discrepancias de cuatro informes

Tres personas vinculadas a la cantera de O Xistral (Muras), abierta en exclusiva para suministrar materiales para la Ciudad de la Cultura de Santiago, fueron absueltas por la Audiencia Provincial de Lugo del delito contra los recursos naturales y el medio ambiente que les imputaba el fiscal, que pidió cinco años de prisión para cada uno. El alto tribunal lucense considera que Pablo Campo Fernández, Manuel Pajón Otero y Siro Vega Rodríguez no tienen responsabilidad penal alguna. Llega a esta conclusión como consecuencia de las discrepancias existentes en los cuatro informes periciales aportados en el juicio, «en unos aspectos básicos y trascendentales, como ocurre respecto a la existencia o no, en la zona afectada, del hábitat prioritario 4020 (brezales húmedos)». Uno expresaba que sí existía hábitat prioritario y los otros tres que no.

Al no poder determinar este último aspecto, el tribunal dice que no puede establecer si el daño ocasionado fue o no grave, como apuntaban en sus escritos de acusación el fiscal y la letrada de un grupo ecologista. El fallo dice que, ante las dudas generadas sobre la existencia de dichos hábitats prioritarios, solo procede la absolución.

La sentencia declara probado que la empresa Piedra Natural de Muras explotó la cantera entre el 2003 y el 2006, haciendo uso de una declaración de impacto ambiental. Como consecuencia de la actividad, la explotación se internó en una hectárea del espacio LIC Serra do Xistral que produjo un daño ecológico y paisajístico. La actividad extractiva no contaba con licencia municipal a pesar de haber sido solicitada en el 2004, no recibiendo contestación de ningún tipo.

El abogado santiagués José Manuel Roibás, que defendió a Pablo Campo Fernández, recordó que la cantera disponía de autorizaciones administrativas y que anualmente presentaba en Industria los planes en los que reflejaba la superficie a ocupar. Siempre, dijo, fueron aprobados y, además, pasó todas las inspecciones. «Tenía las mismas autorizaciones que otras canteras de Galicia y estaba controlada por la Administración», señaló.




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