Constataron «la legitimidad de las peticiones» en las denuncias de asociaciones y grupos de ciudadanos, «el retraso de las autoridades en la aplicación de directivas europeas» y los «numerosos perjuicios ocasionados». También «los esfuerzos de las autoridades para limitar los efectos nocivos», pero esto último no fue suficiente para que los ocho eurodiputados que integraban la Comisión de Peticiones que ayer visitaron las rías de Ferrol y O Burgo y, anteayer, la de Vigo, se fueran «muy impresionados» por lo que vieron. Por el mal estado de la de Ferrol y por los lodos de la de O Burgo, según desgranó el presidente de la delegación visitante, el conservador francés Philippe Boulland. Situaciones que «ya han durado demasiado tiempo».
La comisión desplazada a Galicia prevé tener su informe en mayo, para después enviarlo a la Comisión Europea. «Le tocará dar una respuesta adecuada y, evidentemente, si no se toman medidas, habrá que iniciar un proceso de infracción», agregó Boulland. «Quedan interrogantes por aclarar y muchas cosas por hacer», aunque rechazó señalar un culpable u otro, en referencia a las Administraciones: «No somos una instancia judicial, lo que nos toca es estudiar la problemática y transmitirla. Tenemos que garantizar que los fondos europeos se usen de manera adecuada». Desde la Xunta, tanto el presidente de Augas, Francisco Menéndez, como la directora de Intecmar, Covadonga Salgado, valoraron como «moi positiva» la visita, si bien lamentaron, reconociendo que la de Ferrol es la que tiene «peor situación», que «haxa a percepción social de que o saneamento na do Burgo non é bo: o 99,3 % das augas residuais van a Bens». Reiteraron los «preto de 90 millóns invertidos no seu saneamento dende el 2000», la evolución de la depuración en Galicia, los proyectos de futuro, y rechazaron errores en el sistema de clasificación de las rías o en los métodos de medición del agua: «Cumpren todas as directrices e están avalados», afirmaron después de que una eurodiputada valorase: «Lo que hemos visto es claro y la forma de hacerlo creo que no es la adecuada, temo que el enfoque con el que se mide pueda ser erróneo».
Por otra parte, en su reunión el martes con la delegación, los conselleiros de Medio Ambiente y Mar supeditaron la ejecución de los planes de saneamiento de las rías a que la Administración gallega disponga de recursos necesarios. Así, pidieron apoyo para que Galicia pueda destinar parte de los fondos europeos del 2014-2020 a financiar estas infraestructuras.
Un mariscador, enterrado en lodo hasta los muslos e incapaz de moverse en una «ría totalmente morta», fue la manera de recibir a los eurodiputados. Un pantalán «que flota en fango» o la vista del poblado chabolista en el puente de A Pasaxe se erigieron como puntos calientes del periplo, que terminó con una reunión entre eurodiputados, representantes de la Xunta -reprobaron «que no se nos haya dejado acompañar a la visita»-, y peticionarios. El presidente de Augas de Galicia, y la directora de Intecmar insistieron en que el saneamiento de aguas residuales está completado en la ría y que los lodos son otra cuestión: «Se están analizando, prevemos tener el resultado en unos dos meses, para después comprobar si procede su retirada». Con esto fueron muy críticos los eurodiputados: «No puede hablar de que estas fotos no son realidad, lo vimos en este very very very bad trip. Si capturan marisco y la gente lo come, yo estoy preocupada», espetó la austríaca Angelika Werthmann. «Es evidente que no podemos aceptar estos lodos, por varias razones hay que retirarlos», esgrimió Boulland. La letona Tatjana Zdanoka reprendió: «Soy matemática y sé que toda teoría se puede demostrar, pero la práctica la hemos visto».
Ramón Sixto, portavoz de la Plataforma en Defensa da Ría, y Manuel Cao, patrón mayor, celebraron la conclusión de los eurodiputados, «porque hoxe só o 21 % da ría é produtiva, hai que dragar». «Sodes a nosa última esperanza», les dijeron. Por su parte, el alcalde cullerdense, Julio Sacristán, reprobó que no se convocase a los concellos implicados, para trabajar unidos.
Sin paliativos: «Hemos constatado que existe una fuerte contaminación y que están amenazadas las zonas de explotación de marisco, aunque se había dicho que ya se había dado una solución al problema». Así se refirió ayer en Ferrol Philippe Boulland a la que calificó como la ría gallega más contaminada, que recibe al día cien millones de litros de aguas residuales. Un recorrido en bus trasladaba a los eurodiputados hasta las inmediaciones de la planta de Reganosa, en Mugardos, objeto de las denuncias que el Comité Cidadán de Emerxencia y de otros colectivos llevaron a la UE en el 2007 y que motivaron inicialmente la visita. Sobre el terreno, pudieron comprobar la cercanía de las viviendas al recinto y escucharon las quejas de vecinos. «Queremos saber por qué después de que se declarase su implantación como ilegal por el Supremo no se ha encontrado otra posible localización más adecuada», resumió el conservador Boulland, líder de la expedición. La sentencia fallaba en contra de una modificación del PXOM para la instalación de la planta, pero en el tiempo que tardó en dictarse ya se aplicaron los cambios requeridos, por lo que la planta siguió con su actividad.
A las denuncias sobre la regasificadora se sumaron las más recientes de las cofradías sobre el estado de la ría y su afección a su actividad. Un nauseabundo olor recibió a los europarlamentarios en A Gándara, donde se acumulan gran cantidad de lodos. «Hemos constatado que las peticiones estaban fundamentadas y eran legítimas», dijo. El Comité e IU manifestaron su satisfacción por la visita.