La construcción del puerto deportivo ilegal de Punta Lagoa constituyó la última agresión, hasta ahora, para una zona ya muy castigada, dañando gravemente al último espacio natural que quedaba en una larga franja del litoral de la Ría, entre Alcabre y el puente de Rande: el parque municipal del Monte de la Guía.
Manuel Fernández de Sousa, presidente de Pescanova, es el promotor de este puerto deportivo sobre el que pesan varias órdenes de paralización y otras dos de derribo. |
La empresa que también él preside, Astilleros y Construcciones Lagoa, recibió en junio de 2003 el beneplácito de la Autoridad Portuaria de Vigo, a pesar de la fuerte oposición vecinal encabezada por la Asociación de Vecinos y la plataforma Voces por el Litoral de Teis.
Dispone de 350 plazas de atraque, 31.000 m2 de concesión portuaria en tierra y aparcamento con capacidad para 300 vehículos. Con un espigón de 235 metros y un relleno de más de 27.000 m2, tiene concesión hasta el año 2033.
Usurparon y asfaltaron un cortafuegos del parque como acceso al puerto deportivo |
![]() Playa de a Lagoa |
Las obras en tierra se realizaron sin licencia de ningún tipo y desoyendo varias órdenes de paralización y otras dos de derribo. Además, ante la imposibilidad de pasar el tráfico pesado por el angosto camino que da acceso a la zona, los camiones utilizaron para la construcción del puerto un cortafuegos del monte de la Guía, que sigue siendo, ahora asfaltado, usado cómo acceso. El cortafuegos coincide casi exactamente con el trazado de un paseo marítimo peatonal, proyectado dentro del Plan Especial de Protección del Monte de la Guía (P.E.P. IV-14) que redactó y aprobó el Ayuntamiento de Vigo en el año 2000. Desde el 2005, el Ministerio de Medio Ambiente consigna tres millones de euros para su construcción, sin poder ejecutarla debido a esta usurpación. |
Tolerancia administrativa
El gobierno municipal de Corina Porro no obligó a ejecutar un acuerdo plenario del 31 de enero de 2005, en el que se prohibía "cualquier acceso rodado por el cortafuegos", que sólo podría ser utilizado por los servicios municipales de mantenimiento y seguridad.
Las obras ilegales
realizadas en tierra firme consisten en la ampliación de una nave de
almacenamento de barcos, la construcción de otra nave totalmente nueva
y el asfaltado del cortafuegos, además de otras instalaciones
menores de cafetería, gerencia y aseos que, por cierto, vierten
Chantaje y prevaricación
El Presidente de Pescanova no parece tener demasiados escrúpulos para recurrir a medios tan poco éticos como el chantaje cuando se trata de defender sus intereses.
Esta vez utilizó el Concurso Hípico Internacional, cuyo comité organizador también preside. En plena crisis con el Ayuntamiento por el uso ilegal del cortafuegos, Fernández de Sousa amenazó con dejar de organizar en Vigo la Copa del Mundo de Salto de Obstáculos por "falta de apoyo institucional" y ofreció el campeonato a las autoridades de la ciudad portuguesa de Oporto, que se mostraron muy interesadas.
Eran los días previos la que se debatiera una moción del BNG en el Pleno municipal que instaba a la alcaldesa a prohibir el acceso de camiones hacia el puerto deportivo por el cortafuegos. La moción fue aprobada, pero poco después el camino se volvió a abrir. Al día siguiente de franquearse el paso, el comité organizador confirmaba la celebración en Vigo del concurso hípico.
Denuncia del fiscal
Todas estas ilegalidades dieron lugar la una denuncia ante la fiscalía de la Audiencia Provincial de Pontevedra por presunta comisión de un delito contra la ordenación del territorio y otro de prevaricación omisiva, por la "actitud tolerante de las diversas administraciones".
Pero el presidente de Pescanova siguió adelante con la construcción del puerto, a cuya inauguración asistió, elegantísima como siempre, la alcaldesa de Vigo, Corina Porro.
La fiscalía imputó a la empresa promotora un delito contra la ordenación del territorio "derivado de la construcción de naves en zona sujeta a régimen especial, sin atender a la obtención de las pertinentes licencias y pese a su paralización y orden de demolición". Esta denuncia, que fecha del 5 de septiembre de 2005, quedó paralizada hasta ahora por el contencioso administrativo interpuesto por los responsables de Astilleros y Construcciones Lagoa.
También el colectivo Voces por el Litoral de Teis ha interpuesto un contencioso contra esta empresa en un juzgado de Vigo por un delito contra la ordenación del territorio.
Degradación ambiental
La situación ambiental del litoral de Teis es el resultado de una terrible degradación. Las pocas playas que se conservan corresponden justo a la falda de la Guía, única zona, desde Bouzas hasta la linde con el Ayuntamiento de Redondela, donde podemos encontrar algunos tramos de costa sin modificar por la acción humana.
No podemos decir lo mismo de Punta Lagoa. Tal y como aparece en la carta náutica de la Comisión Hidrográfica del año 1910, había allí un arrecife de piedra que se conocía como O Corno, actualmente desaparecido bajo un relleno sobre el que se asientan dos empresas. Entre este arrecife y la tierra firme había fondos arenosos y rocosos que durante la bajamar formaban una laguna que le daba nombre a este punto geográfico.
Es tal el nivel de alteración que sufrió este lugar que en las cartas náuticas actuales, el punto que aparece como Punta Lagoa se localiza en la parte norte del relleno, cuando en su estado natural correspondía a un lugar de la ladera del Monte de la Guía, una playa con un potencial biológico altísimo.
Contaminación industrial
La instalación, a partir
de la década de los 60, de una empresa de desmantelamiento de buques,
supuso el inicio de la grave situación ambiental en la que hoy se
encuentra. Desde esas fechas la empresa allí instalada se dedicó a
ganar terreno al mar con restos de su propia actividad y otros de
distintos orígenes. La única gestión de los residuos altamente tóxicos
que allí se produjeron fue la incineración y el vertido
Esta situación de degradación ambiental, consentida desde la Autoridad Portuaria de Vigo, fue justo la utilizada, con total desverguenza, por este mismo organismo para autorizar la construcción del Puerto Deportivo. Como si semejante actuación fuera a resolver el problema: los contaminantes seguirán alojados tanto en los sedimentos, como en la flora y fauna betónica, constituyendo un foco de polución constante del medio marino circundante, y en consecuencia, de la red trófica humana.
Destrucción de la biodiversidad
A pesar de todo esto, la zona conservaba hasta hace poco una riqueza biológica notable.
El puerto deportivo fue edificado sobre uno riquísimo banco marisquero, ahora destruido, especialmente productivo en navaja y longueirón, pero también en berberechos y almejas, afectando al medio de vida de muchas familias que se ayudaban del marisqueo.
Su construcción (relleno y dragado) alteró gravemente la hidrodinámica de la ría, alteración que puede acarrear para las zonas próximas las peores y más inmediatas consecuencias.
Porque aunque parezca imposible después de tanta destrucción, muy cerca de allí, en el arenal de Punta Areíño, y hasta la costrución del puerto deportivo, seguían abundando berberechos, almejas y navajas.
Asimismo, cabe destacar la presencia en toda la zona del caballito de mar (Hippocampus ramullosus) y de la fanerogama Zoostera marina (que crea un ambiente excelente en el que encuentran refugio, alimentación y lugar adecuado para la cría numerosos animales) siendo también área de campa de una manada de delgines mulares (Tursiops truncatus).
Para nosotros, mal llamados sapiens, significa además de todo esto, una grave destrucción del paisaje, la desaparición de la playa de A Lagoa y la imposibilidad de acceso de los ciudadanos y ciudadanas al litoral.